El gobierno federal destinó el año pasado 18 veces más recursos a los estímulos fiscales a gasolinas que a gasto en protección ambiental, de acuerdo con los datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

En el 2022, en medio de la escalada de los precios internacionales del petróleo por las tensiones entre Rusia y Ucrania, el gobierno llegó a otorgar 100% del estímulo fiscal al IEPS de gasolinas, por lo que dejó de recaudar 373,000 millones de pesos.

Lo dejado de recaudar por estos estímulos, muy criticados por ser regresivos, fue 18.5 veces mayor a lo que el gobierno gastó en la función de protección ambiental, que sumó apenas 20 mil 082 millones de pesos.

Los estímulos fiscales a gasolina, que en este año han empezado a reducirse, afectaron fuertemente la recaudación de impuestos el año pasado, y pese a que el gobierno defendió que esto evitó una inflación de dos dígitos, para algunas instituciones esto fue un gran costo fiscal, en donde se sacrificaron gastos más necesarios para la población.

Un último informe del Banco Mundial señaló que subsidios como los que se dieron a la gasolina son ambientalmente dañinos, por lo que los recursos que se utilizan en ellos podrían ser utilizados de mejor manera para combatir el cambio climático.

“Para subsidiar el consumo de combustibles fósiles, los países gastan alrededor de seis veces lo que prometieron movilizar anualmente en el marco del Acuerdo de París para las energías renovables y el desarrollo bajo en carbono”, indicó.

En este sentido, Axel Van Trotsenburg, director gerente senior del Banco Mundial, señaló que siempre se dice que no hay dinero para el clima; sin embargo, sí existe dinero, pero se es utilizado para otras cosas que, incluso, afectan el medioambiente.

“Si pudiéramos reutilizar los billones de dólares gastados en subsidios derrochadores y destinarlos a usos mejores y más ecológicos, juntos podríamos abordar muchos de los desafíos más apremiantes del planeta”, destacó.

Creció gasto ambiental 19.2%

Los datos mostraron que, al interior de la función de desarrollo social, el gasto en protección social fue el que más incrementó en el cuatrimestre.

Entre enero y abril de este año, se destinaron 5 mil 402 millones de pesos al gasto en protección social, lo que significó un aumento de 19.2% en comparación con el mismo periodo del año pasado.

De acuerdo con Jorge Cano, investigador de México Evalúa, el avance en el gasto de este rubro se ha debido a mayores recursos hacia los programas de Gestión Integral y Sustentable del Agua, así como el de Planeación, Dirección y Evaluación Ambiental.

Si bien el aumento en el gasto fue significativo, al interior de la función de desarrollo social es la protección ambiental el rubro que recibe menores recursos, por debajo del gasto en recreación, cultura y otras manifestaciones sociales, con 8 mil 285 millones de pesos.

Con información de El Economista.