El Gobierno federal tiene dos formas de actuar en cuanto a la atracción de inversiones. Por un lado, la postura que toma en el sector energético que causa incertidumbre para los empresarios; y otra en la que es un facilitador, como ocurre en la manufactura. Desgraciadamente, lo primero contamina a otras industrias, manifestó Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).

“Desgraciadamente hay confusión por el tema de energía, hay confusión en la manufactura. Ahí es donde nos metemos a trabajar (…) queremos generar confianza en México. Que no todos lo vean como que en México está todo complicado para las inversiones. Se están dando. Traemos una discusión en la mesa de energía, pero estamos trabajando también en esa parte”, afirmó en La Silla Roja, de El Financiero-Bloomberg.

Bajo este contexto, el líder de la Iniciativa Privada del país habló sobre las solicitudes de Estados Unidos y Canadá para iniciar consultas referentes a la política energética de México, esto bajo lo permitido en el T-MEC. Mencionó que es una situación que ya se esperaba, porque desde tiempo atrás ambos países habían manifestado sus inquietudes al respecto.

Sin duda, aclaró, las diferencias con los socios comerciales se refieren a los cambios en las reglas que hacen operar el sector energético mexicano, aunque se ha avanzado con el rechazo de la reforma eléctrica, ejemplificó; sin embargo, aseguró que al ser un conflicto Estado-Estado se mantendrán al margen, pero con activa participación para resolver la disputa antes de que escale a sanciones más severas.

“Vamos a tener reuniones para ver cómo podemos participar desde nuestra trinchera. Es lo bueno que tenemos 75 días, de lo contrario creo que podría ser muy costoso que nos quitarán en ciertos sectores los aranceles, muy complicado y le pegaría a la agroindustria. México tiene un brinco importante en muchas áreas gracias al T-MEC, por eso la preocupación de cuidar este instrumento transversal que nos beneficia a todos”, argumentó.

En esta línea de encabezar al organismo que cuida los intereses económicos del país, Francisco Cervantes hizo énfasis en la importancia de atraer inversiones y aprovechar ser el principal socio comercial de Estados Unidos. En este sentido, sostuvo que tiene una “insistencia intensa” con funcionarios para aprovechar la relocalización de empresas para estar más cerca del mercado estadounidense, pues es una oportunidad que no se sabe si se volverá a tener a futuro.

Incluso, aseguró que en un momento de alta inflación (de 8.16 por ciento en la primera quincena de julio) es importante el esfuerzo que se hizo con el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC), aunque no es suficiente. Un elemento que ayudaría, consideró, es el tema de la inversión, la confianza y la certeza jurídica, pues “la inflación sin inversión, el resultado entonces sí sería muy grave”.

Relación de diálogo 

Francisco Cervantes, quien también fue presidente de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (CONCAMIN), afirmó que la relación de los empresarios, puntualmente del CCE, con el presidente Andrés Manuel López Obrador está basada en el diálogo. De hecho, resaltó que “el gobierno nos trata bien”.

Recordó que al inicio de la pandemia de Covid-19, en abril de 2020, hubo un claro choque entre la visión privada y la gubernamental que se logró arreglar tanto con el Ejecutivo como con algunos secretarios, con los que encuentran buen diálogo y disposición para tratar temas que les interesa abordar.

“No nos gusta la confrontación, no somos partidarios de ello, sino de la capacidad del diálogo. No me imagino un país sin un sector privado que tenga fortaleza, ese compromiso con su país para que le vaya bien. El CCE es una voz que representa a todos y una voz que cuando las cosas no están bien las dice de forma respetuosa, no la confrontación, pero sí ponerlas sobre la mesa. (Si somos) el contrapeso es un sí y un no, depende el punto que lo veamos”, señaló.

Con información de El Financiero.