El gusto y los hábitos de los consumidores mexicanos cambió de manera importante después de la pandemia y el tema de la movilidad se ha hecho trascendental: ahora planean adquirir un auto, pero no cualquier vehículo, sino uno que sea amigable con el medioambiente, que les genere ahorros y que la marca del productor los respalde.

Pero para que estas exigencias puedan cumplirse, las autoridades en México deben darle un impulso a la infraestructura para masificar estas unidades, así como mejorar la regulación para que esté a la par de los estándares internacionales.

Francisco Bautista de Deputy de Manufactura Avanzada y Movilidad de EY Latinoamérica, destaca el aumento del uso del vehículo personal tanto de cuatro como de dos ruedas.

“Tanto los automóviles como las motocicletas son el principal medio de transporte para el mexicano. Y eso lo podemos corroborar con la fuerte intención de compra que existe. Entonces, respecto a los viajes, ya tenemos cifras para decir que es el modelo del futuro”, afirmó en entrevista.

El índice de consumo de movilidad 2023, realizado por EY, mostró que 64% de los mexicanos entrevistados tiene la intención de comprar un vehículo ya sea nuevo o usado en los próximos 24 meses, un nivel superior a 44% de intención del resultado general de la encuesta realizada en 22 naciones durante marzo pasado.

“En México el sedán es el rey. Realmente es la intención de compra: el sedán se lleva ampliamente la preferencia. Contrastándolo con otros países, por ejemplo, en Estados Unidos está muy marcada la SUV y ya comienza a haber también algo de electrificación y de enchufables, pero México es sin duda el sedán el que está partiendo plaza. Es el número uno en preferencia por mucho”, explicó por su parte Víctor Soulé, líder de Manufactura Avanzada y Movilidad de EY Latinoamérica.

El índice de consumo de movilidad destaca que la intención de autos eléctricos mantiene su tendencia al alza, pues al cierre del año pasado, la cuota de mercado global de este tipo de unidades pasó a 18%, es decir 11 puntos porcentuales más que en 2020.

Las 20 naciones clave para esta industria han establecido objetivos de electrificación, e incluso en la Unión Europea espera que para el año 2050 se alcance el objetivo de cero emisiones netas.

Ambos especialistas coinciden en que la falta de infraestructura y la actualización de las normas son fundamentales para que México desarrolle este mercado.

En 2022, los vehículos eléctricos e híbridos representaron 4.9% de las ventas totales de autos, y actualmente 44% de los compradores potenciales puede optar por una unidad de este tipo, señala EY.

“En México tenemos una distinción contra el resto del mundo bastante interesante: el híbrido enchufable es el que cada vez es menos querido por los mexicanos. Vemos un crecimiento interesante en los híbridos y un crecimiento interesante en los totalmente eléctricos. ¿Por qué se da esto? porque no tenemos la capacidad en desarrollos verticales de yo quiero poner un cargador en mi casa. Entonces, el tener la capacidad de poder hacerlo en mi casa elimina básicamente todo el tema de rango de ansiedad que tenemos”, explicó Francisco Bautista.

En el país estamos muy cerca de llegar a un tipo en que el consumidor ya entiende perfectamente el valor agregado, que está pensando en el medio ambiente, las prestaciones, en el costo de la gasolina, agregó.

Los entrevistados coincidieron en que el sector automotriz es uno de los más atrasados en la experiencia online.

“Entonces la industria automotriz tiene que mejorar su experiencia online de forma significativa porque cada vez el mercado lo demanda más. Creemos que se va a eficientar, serán más chiquitos, serán mucho más como agradables, bonitos, donde puedas tener una experiencia positiva”, dijo Bautista.

Con información de Revista Expansión.