Dado el bajo nivel de comercio que tiene México con los países de América Latina, el plan para contener la inflación que convocó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, tendrá resultados limitados y obedece más a factores políticos que económicos, aseguraron expertos entrevistados por Expansión.

Además, la propuesta del gobierno mexicano llega cuando el alza de precios ha comenzado a desacelerarse en algunos países de la región.

En marzo, la inflación en México fue de 6.85%, muy lejos de la meta de 3% +/- un punto porcentual del Banco de México (BANXICO).

Gabriel Pérez del Peral, académico de la Escuela de Gobierno y Economía de la Universidad Panamericana (UP), comentó sobre el cambio de las expectativas de una menor inflación para los siguientes meses del año publicadas recientemente por el banco central.

La propuesta del presidente López Obrador contempla la creación de un grupo de trabajo que posteriormente elaborará un plan de acción que facilite el comercio de productos de consumo básico entre los países, así como de fertilizantes químicos y orgánicos.

“Hay muy poco comercio entre México y América Latina. Cuando tratas de hacer un pacto para frenar los precios, o reducir aranceles, como no hay comercio con estos países, el impacto es nulo”, apuntó Iván Franco, fundador de la consultora Triplethree International.

Añadió que muchos de los productos que comercia México con América Latina no forman parte de la canasta básica, “muchos de ellos son productos de lujo”, sostuvo.

Los países que contempla el gobierno mexicano que participen en este plan son: Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Honduras, Venezuela y San Vicente y las Granadinas.

Ingredientes del plan antiinflación

A decir de Franco, para que la inflación general baje en los países que invitó el presidente de México, tiene que enfocarse en los productos de la canasta básica de estos países, con medidas como cero aranceles, facilitar los costos de logística y comercio, vía quitar algunas cargas impositivas.

Gabriel Pérez, profesor de la UP, apuntó que los países participantes también deben hacer un compromiso de disciplina fiscal, así como eliminar la opacidad en materia económica, aumentar la competencia, la educación y canalizar inversiones en infraestructura y no en programas sociales.

Una vez que se cumpla con los puntos anteriores, podrán darse los acuerdos en materia de aduanas y facilitación comercial, agregó.

Aunque el gobierno mexicano pactó con cadenas de autoservicio -con los pactos contra la inflación y la carestía del año pasado- “al medidor de inflación, que calcula INEGI, no lo puedes engañar”, subrayó Iván Franco.

Para disminuir la inflación también se necesita mejorar los niveles de ingreso y aumentar el empleo, pues la inflación tiene un mayor impacto en la población de menores ingresos.

Asimismo se requiere una coordinación entre la política fiscal y monetaria, combatir la inseguridad y la impunidad; además de garantizar gobernabilidad y trabajo en la parte social para aumentar la productividad, consideró el académico de la UP.

Agregó que se tiene que ampliar la cobertura del PACIC a las tienditas y tianguis, que es donde se surte la mayoría de los mexicanos; y no dejarlo solo en las cadenas de autoservicio.

Tema político

Para Franco, quien también es analista en Expansión, no hay herramienta más efectiva contra la inflación que la política monetaria.

“Este pacto, es más una cuestión política que puede ayudar a acercar economías, al menos en palabras, porque México siempre ha estado muy alejado de América del Sur”, reiteró.

México, país que propuso el plan contra la inflación en América Latina, celebrará la elección presidencial en 2024.

Tanto BANXICO como analistas señalan a la inflación subyacente, particularmente lo que tiene que ver con servicios, la que muestra una mayor resistencia a la política monetaria.

La inflación seguirá descendiendo mes con mes, pero más que por el plan antiinflación en la región, será por la política monetaria, dijo Franco.

Hasta el momento no se conocen objetivos ni metas de este plan. Solo se dio la convocatoria de López Obrador para una reunión en Cancún, Quintana Roo.

“Es la retórica populista”, consideró Pérez, de la Panamericana.

Tanto en México como en Latinoamérica, ahora la inflación es un problema de demanda, ya no de oferta, subrayó el académico de la UP.

Con información de Revista Expansión.