Ensenada, B.C.- Ante la peor crisis de logística para el sector primario representado por el Consejo Agrícola de Baja California, derivado de los tiempos de espera en las dos direcciones para cruzar el tramo de la muerte, Walberto Solorio Meza, presidente del organismo informó que tanto el ejido como los empresarios, se reunieron con los tres niveles de gobierno.

Se plantearon varias alternativas, una la ruta alterna que empezó a funcionar desde el sábado, pero que ha sido ineficiente, de acuerdo a múltiples usuarios frecuentes del tramo, otra será habilitar un tercer carril de 500 metros a un costado del puente de San Carlos, punto que genera la gran crisis, pero que tiene que gestionarse con particulares, porque los terrenos tienen dueño, dijo.

Solorio Meza indicó que, durante el fin de semana, las autoridades establecerían comunicación con los dueños de la tierra colindantes a la zona de crisis, para solicitarle la autorización del uso de su tierra durante el periodo de construcción y rehabilitación del tramo referido.

“Además, tiene que haber un esfuerzo muy bien organizado y perfectamente bien estudiado por parte de la autoridad municipal, para que a través de tránsito, hayan dispuestos oficiales a lo largo de toda la zona de crisis que permitan una fluidez más dinámica”, afirmó.

 PÉRDIDA DE COMPETITIVIDAD

Solorio Meza recordó que durante los primeros siete días de la crisis que inició la semana pasada, se perdieron más de 7 millones de dólares por parte de productores agremiados al Consejo Agrícola de Baja California.

“Estos son más de 140 millones de pesos que tendrán que absorber las empresas y que lastimarán tanto las proyecciones anuales, como los proyectos que ya estaban definidos, sin contar, los problemas que ha generado en la relación comercial binacional, al no ser un destino con certeza para invertir”, expresó.

Los tres niveles de gobierno, dijo, deben entender que el sector primario de la agricultura representa el 2.5 por ciento del producto interno bruto estatal, que generan cientos de miles de empleos, divisas y empresas, que le dan vida a una parte sustancial del desarrollo social de Baja California y entre todos, se debe cuidar.

Puntualizó que habría otra reunión para determinar si se podrá establecer el carril de 500 metros junto al puente San Carlos, de lo contrario, definir un camino que reduzca los tiempos y permita que está situación no crezca, menos en el marco del fin de semana del 4 de julio, que atraerá, como de manera histórica sucede, a miles de visitantes de diversos puntos de la región.