El 2023 arrancó complicado para las finanzas de los estados del país, pues en enero recibieron menos dinero a lo programado por concepto de participaciones del gobierno federal.

El Estado de México y la Ciudad de México fueron las dos entidades que reportaron los montos más altos de recursos faltantes aprobados a finales del año pasado. Mientras que Nuevo León, Querétaro y Sinaloa recibieron más dinero a lo programado, frente a las otras 29 entidades federativas, muestran cifras dadas a conocer por la Secretaría de Hacienda.

El 80% de los ingresos que ejecutan las entidades federativas y los municipios tienen su origen en las transferencias que les hace el gobierno federal.

La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) atribuye esta caída a una disminución, de 13.3% real, en enero de la recaudación federal participable, lo que se tradujo en un descenso de 4.8% real anual en las participaciones que se entregan a entidades federativas y municipios.

En total, el faltante para las 32 entidades fue de 4 mil 723 millones de pesos. 21 estados, que representan 66%, tuvieron este problema, mientras 11 estados, 34% registraron ingresos por arriba de lo programado.

Sin embargo, las aportaciones destinadas a educación, salud e infraestructura social, que también forman parte del gasto federalizado, crecieron 3.1% real respecto a enero del año anterior, explicó Hacienda en su reporte de enero de las finanzas y deuda públicas.

Encienden luces rojas 

La situación enciende las luces rojas para las finanzas públicas, ya que se estima un crecimiento lento en la recaudación de impuestos, especialmente de ISR, que proviene principalmente del pago de impuestos de las empresas, por actos de fiscalización, es decir, ingresos no recurrentes, explicó Mariana Campos, coordinadora del Programa de Gasto Público y Rendición de Cuentas de México Evalúa.

La amenaza para las entidades viene porque cuando hay faltantes como los registrados en enero, estos se compensan con dinero del Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF), el cual reportó niveles mínimos históricos a finales de 2022.

Al cierre del año pasado el FEIEF reportó un saldo de 21 mil 847 millones de pesos, ni la tercera parte de su mayor saldo en 2018 que fue de 76 mil 548 millones. La mayor parte de estos saldos fue utilizada ante la desaceleración de la economía mexicana en 2019 y la crisis económica generada por la pandemia de covid-19 en 2020, refieren cifras de Hacienda.

En enero, la calificadora de crédito Moody’s advirtió que en 2023 este fondo sufrirá una reducción de 43% como consecuencia de que la economía crecerá menos a lo proyectado por Hacienda: 3%, además de “las estimaciones de recaudación optimistas en el paquete económico del gobierno federal”.

Con información de Revista Expansión.