El Banco de México (BANXICO) mantuvo la tasa de referencia en 11.25 por ciento en una decisión unánime y advirtió que se mantendrá en ese nivel durante un periodo prolongado, para lograr la convergencia hacia la meta de inflación.

La Junta de Gobierno del banco central revisó ligeramente a la baja sus pronósticos de inflación para el presente año, pero advirtió que el panorama será complicado e incierto a lo largo de todo el horizonte de pronóstico, con riesgos al alza.

“Ante ello, para lograr la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3 por ciento, considera que será necesario mantener la tasa de referencia en su nivel actual durante un periodo prolongado”, señaló BANXICO.

Al señalar este panorama complejo para la inflación, el mercado prevé que así se mantenga la tasa en lo que resta del año e incluso sin cerrar la posibilidad a otro incremento.

“Se considera que el balance de riesgos respecto de la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico se mantiene sesgado al alza”, señaló la autoridad monetaria en su comunicado.

BANXICO prevé que al cuarto trimestre de este año la inflación general promedie 4.7 por ciento, menor a 4.8 por ciento del anuncio de marzo; mientras que en la subyacente la mantuvo en 5.0 por ciento. Continúa anticipando que la inflación converja a la meta en el cuarto trimestre de 2024.

Atentos a inflación

La economista en jefe de Finamex, Jessica Roldán, resaltó que a pesar de una mejora de la inflación en el margen al descenso de la inflación todavía le queda un largo camino por recorrer.

“Esperamos que la trayectoria de la inflación descienda más lento sobre todo en la segunda mitad del año, el panorama va a ser relativamente complicado y es importante que el banco señale todos estos matices”, planteó Roldán a El Financiero Bloomberg.

Con un panorama complejo para la inflación, el banco central apuntó como riesgos la persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados. Para este componente, los servicios son los que han ejercido mayor presión y con sus niveles más altos desde 2003 en meses recientes.

También señalaron que la depreciación cambiaria ante eventos de volatilidad financiera internacional puede presionar a la inflación; un caso puede ser que en Estados Unidos se complique el debate sobre el techo de la deuda entre demócratas y republicanos y provoque episodios de incertidumbre.

Además, mayores presiones de costos y presiones en los precios de energéticos o agropecuarios podrían provocar un rebote en el nivel de precios.

Descartan más alzas

El economista en jefe para Latinoamérica de Barclays, Gabriel Casillas, manifestó que de haber incrementos en la tasa sería si las proyecciones de BANXICO sobre la inflación se ven rebasadas.

“Fue muy importante el balance de riesgos para la inflación que sigue sesgado al alza; realmente no quieren bajar tasas muy pronto. No hay una forma explícita de decir ‘ya cerramos la puerta’ para subirla”, dijo Casillas a El Financiero Bloomberg.

“No descartaría que, si las presiones de inflación no solo no se aminoran, si no regresan, entonces veamos a BANXICO reiniciando su ciclo alcista; no es el escenario base, pero no deberíamos cerrarnos a la idea de que si la inflación se acelera podríamos ver a BANXICO subiendo tasas”, dijo Luis Gonzali, director de inversiones de Franklin Templeton.

El catedrático del ITAM, Víctor Gómez Ayala, planteó que el nivel de 11.25 por ciento de la tasa será en el que cierre el año y que se tendría que “ver una sorpresa mayúscula en la inflación” para ver otro aumento.

“El hecho de que esté advirtiendo que ese escenario está sobre la mesa lanza una advertencia de que está convencido de que la prioridad es el control de la inflación, más allá de otras presiones que puedan aparecer”, precisó Ayala.

Aunque los riesgos están al alza para la inflación, BBVA señaló que tras una larga pausa, BANXICO cambiará su enfoque hacia recortes a la tasa. “Creemos que BANXICO no debería endurecer aún más la postura en 2023. Por lo tanto, con la inflación disminuyendo hacia 4.5 por ciento para fines de año, debería comenzar a recortar las tasas en el cuarto trimestre de 2023.

Con información de El Financiero.