El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México sufrirá una desaceleración en el 2023, debido a su alta exposición al ciclo económico mundial y a una menor demanda de las economías avanzadas, particularmente de Estados Unidos, estimó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Según sus estimaciones, México conseguirá un crecimiento de 1.5 por ciento en el PIB del año próximo, tasa inferior en seis décimas al pronóstico de 2.1 por ciento previsto por ellos mismos en junio.

Asimismo, esta estimación es inferior a 3 por ciento que utilizó el gobierno como base para calcular los ingresos presupuestales del año próximo.

En el Interim Economic Outlook, los expertos de la OCDE ajustaron al alza su pronóstico para el PIB mexicano de este año, para dejarlo en 2.1 por ciento desde 1.9 por ciento que tenían proyectado hace tres meses. De manera que la proyección actualizada para el 2023, supone una desaceleración.

Previeron que la moderación en la actividad económica también será resultado del endurecimiento de la política monetaria, lo que en conjunto permitirá moderar la escalada de la inflación de una forma gradual.