México necesita iniciar la discusión de una reforma fiscal que permita aumentar la base gravable, mediante la simplificación y la difusión masiva de obligaciones y beneficios, de acuerdo con especialistas.

Sin embargo, reconocen que será difícil que se implemente durante los últimos dos años del sexenio, pues cercana la sucesión presidencial, adquiere relevancia el cumplimiento de promesas, como la de no aumentar ni crear nuevos impuestos.

“¿Por qué es necesaria? Pues porque nuestros ingresos son muy bajos comparados con las necesidades de gasto. El problema es que los gastos crecen año con año y no estamos teniendo los suficientes ingresos para cubrirlos, y es por eso que necesitamos prácticamente aumentar el ingreso o reducir los gastos, y si ninguna de esas dos cosas sucede, nos vamos a tener que endeudar”, explicó la directora del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), Alejandra Macías.

Consideró que una reforma fiscal debe de ser integral, redistributiva y sostenible para las generaciones actuales y futuras: “Tiene que ser progresiva, cobrar impuestos a las personas que más tienen: impuestos a la riqueza”.

Esa reforma también tiene que aumentar la base gravable, ya que no es suficiente solo ajustar las tasas de impuestos a los mismos contribuyentes, agregó.

Advirtió que retrasarla presiona a las finanzas públicas, pues se reduce el espacio fiscal para hacer política pública de coyuntura.

Jesús Rodríguez Ambriz, presidente de la Asociación Mexicana de Contadores Públicos, consideró que la reforma necesita simplificar más el pago de impuestos y brindar estímulos mediante deducciones a contribuyentes responsables.

Asimismo, se tendría que implementar una campaña masiva de difusión para que todos estén enterados de sus obligaciones, y que conozcan los beneficios de cumplir, como el contar con mejores servicios e infraestructura.

“Aquí lo que necesitamos nosotros es una reforma equitativa, práctica y simplificada, y no solamente de palabra, sino que el usuario que vaya a Hacienda entienda cuánto hay que pagar y por qué tiene que pagar”, refirió.

Consideró que sacar adelante una reforma fiscal en lo que resta del sexenio ya está complicado por el tema electoral.

“Vienen dos años consecutivos de elecciones y ya está complicado, también por ese aspecto se cuidan y tratan de buscar de que ‘Mira, no aumente impuestos, lo cumplí’. Viene la elección en el Estado de México y es un bastión que te dará un panorama para el siguiente año”, añadió.

El gobierno no propuso cambios fiscales en el Paquete Económico 2023, y ha dicho que no habrá más impuestos o aumentos de los existentes en lo que resta de la administración.

Se necesitan más estímulos fiscales para la inversión

Es preciso que el Gobierno federal trabaje en incentivos fiscales para empresas, pues al compararse con otros países, los apoyos son pocos o inviables en México, aseguró el presidente de la Comisión Técnica Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México, Miguel Ángel Tavares.

México podría perder competitividad ante otras naciones que cuentan con más y mejores ventajas para las organizaciones, señaló.

Indicó que antes de invertir, las empresas observan la carga tributaria, es decir, calculan el peso de los impuestos sobre los ingresos, y además valoran ventajas y oportunidades que tienen para crecer en sus respectivos sectores.

El representante de los Contadores Públicos señaló que otras áreas de oportunidad de la administración federal están en mejorar sus procesos de comunicación con los contribuyentes, y en actualizar deducciones y cifras en función de las necesidades actuales, como los datos de deducción de colegiaturas, pues no se actualizan desde 2013.

Con información de 24 Horas.